Cada uno de nosotros somos únicos e irrepetibles, por tanto, cada uno de nosotros asimilamos e interpretamos cada experiencia de nuestras vidas de manera diferente. Expresamos nuestros sentimientos de forma peculiar, nuestra manera de actuar es distinta y nuestras reacciones también lo son. Es muy habitual que nuestro punto de vista sobre un acontecimiento nos parezca el correcto, pero, ¿y si hubiéramos vivido otra vida?, ¿en otro lugar o con otras personas? Entonces, ¿nuestras decisiones serían las mismas?
A lo largo de nuestras vidas entablamos diferentes tipos de relaciones: vínculos familiares, amistosos, afectivos, amorosos, sociales, profesionales, y muchos más. Pasa lo mismo con cada historia de amor. Cada una es única y verdadera. Cada una la vivimos en épocas diferentes y nuestro estado emocional y circunstancial es diferente, así la interpretación que le damos al amor en cada época,es exclusiva.
Una sonrisa, un abrazo, una mirada, un beso, son actos que nos permiten demostrar a alguien qué es para nosotros. En definitiva, nos permiten expresarnos, nos trasmiten sentimientos; incluso ganamos salud y fortalecemos el sistema inmunológico regalándolos.
Lo habitual es regalar este afecto en diferentes circunstancias. Nos podemos definir como heterosexuales, homosexuales, bisexuales, transexuales, y estas orientaciones pueden cambiar según la época de nuestras vidas. De estas circunstancias han ido naciendo nuevas formas de amar, y entre ellas está el poliamor.
Vamos a introducirnos en el poliamor diferenciándolo de la poligamia. Vimos poliamor en “Vicky, Cristina, Barcelona” de Woddy Allen. Se basa en relaciones definidas por acuerdos entre los miembros que favorecen la libertad, el respeto, la comunicación, la honestidad, la negociación, etc. La poligamia, en cambio, es una manera de clasificar la unión múltiple con una base religiosa o tradicional, en ella encontramos una norma cultural. Es decir, la poligamia se puede describir como el matrimonio de un hombre con varias mujeres o una mujer con varios hombres.
En el poliamor no se le da énfasis al matrimonioy se ofrece la posibilidad de tener varios amantes sin tener en cuenta su género. No tiene una estructura definida, puedes identificarte como bisexual y tener al mismo tiempo una relación con un hombre y con una mujer, que a su vez ellos tienen relaciones con otras personas, todo se puede pactar.
Con el término relación no nos referimos a relaciones sexuales exclusivamente, es perfectamente natural sentir atracción, afecto o amor por varias personas a la vez.El poliamor se basa en el amor y no en el sexo. Por eso las personas asexuales también pueden ser poliamorosas. El sexo no es imprescindible, cada grupo poliamoroso determina sus bases.
De las ya conocidas orientaciones sexuales, heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad o transexualidad,surgen otras formas de amar. La persona pansexual siente atracción física indistintamente por hombres o mujeres, siempre que la relación esté fundada en aspectos románticos, intelectuales, emocionales, espirituales y hasta filosóficos. Las personas sapiosexuales se sienten atraídas sexualmente por la inteligencia de otro individuo; les fascinan o seducen los conocimientos y que se usen de manera inteligente. Las personas demisexuales sienten atracción sexual exclusivamente hacia personas con las que previamente se han desarrollado lazos emocionales estables. Las personas antrosexuales desconocen su orientación sexual pero tienen flexibilidad sexual que les permite establecer vínculos amorosos con cualquier persona de cualquier género e identidad. La antrosexualidad combina la demisexualidad, la bisexualidad y la pansexualidad pero a diferencia de éstas, desconoce su orientación sexual. Las personas Genderqueerpresentan una identidad en la que el individuo no se identifica con los géneros binarios tradicionales occidentales, femeninos y masculinos.
¿Estamos preparados para amar?Cada uno de nosotros somos libres de amar a nuestra manera, siempre y cuando no hagamos daño a aquellos que se sientan involucrados.Podríamos escribir párrafos y más párrafos buscando nuevas etiquetas para identificar las formas de amar. Si tu forma de amar es otra, estaremos encantados que la compartas con nosotros. ¡El saber no ocupa lugar!